El Gobierno socialista en funciones de Mallorca regala 400.000 euros más a las editoriales de catalán
La presidenta Cladera concede 10 días antes de abandonar el cargo nuevas ayudas para imponer esta lengua
El Gobierno socialista de Mallorca dispara un 30% el gasto para imponer el catalán en la isla: 2,4 millones
El Gobierno socialista de Mallorca paga hasta el alquiler de la sede de los espías del catalán
El Gobierno socialista en funciones del Consell de Mallorca que preside Catalina Cladera, se despide del cargo regalando 400.000 euros a las editoriales que publican libros en catalán. A falta de 10 días para que el próximo 8 de julio se produzca el cambio de gobierno en el Consell de Mallorca, Cladera rubrica una nueva ayuda para la imposición del catalán, en este caso, dirigida a empresas editoriales que utilicen esta lengua.
En concreto son, un total de 394.394 euros destinados a la producción editorial y fonográfica en lengua catalana. De ese montante global, 318.697 euros corresponden a editoriales, 65.698 a obras fonográficas y 9.997 euros para la edición de juegos de mesa. Se trata de unas subvenciones incluidas en el disparado gasto público en catalán que en este año electoral de 2023 está realizando Cladera y que ha destinado a este fin hasta un 30% más que el año pasado, elevando hasta los 2,4 millones este capítulo del presupuesto.
Un gasto que puede tener las horas contadas, excepto en las partidas ya comprometidas este año, dado que Vox entrará a gobernar en coalición con el PP en el Consell de Mallorca. La formación de Santiago Abascal ya advirtió que su primer objetivo en materia de lengua es cerrar el grifo a entidades multisubvencionadas estas dos pasadas legislaturas por los socialistas, desde la institución insular o desde el Govern balear, como la Obra Cultural Balear (OCB).
De hecho el conseller electo y número uno de esta formación en la Isla, Pedro Bestard, en una rueda de prensa convocada frente a la sede de esta entidad, afirmó que «la OCB ya puede despedirse de las ayudas, las subvenciones, los protocolos, los convenios… Se acabó. No van a seguir viviendo como faraones a costa de los mallorquines. Si tanto les gusta lo catalán, ya saben, pueden coger sus trastos, marcharse a Cataluña y pedir allí subvenciones».
En el acuerdo de gobierno firmado por PP y Vox en la Comunidad Valenciana, esta formación será la que en el nuevo gobierno del popular Carlos Mazón asuma las competencias de la Consejería de Cultura para eliminar así las subvenciones a los chiringuitos catalanistas algo que ya figura en la iniciativa de Mazón para el diseño de lo que será la futura ley de señas de identidad valencianas.
Habrá que ver si ese modelo se traslada a un Consell de Mallorca cuya sesión de constitución plenaria tendrá lugar el próximo sábado día 8 de julio a las 18,30 horas, y donde se producirá la primera votación para elegir al nuevo presidente de la institución insular. Será el popular Llorenç Galmés dado que que el pacto firmado entre Vox y PP para la investidura de Marga Prohens como presidenta del Govern en un gobierno en solitario, incluye la entrada de los de Abascal en los Ejecutivos insulares de Mallorca y Menorca.
Galmés, con ese gobierno de coalición con Vox que logró cinco consellers en las elecciones insulares del 28 de mayo, se asegura una estabilidad de la que, sin ir más lejos, carece el alcalde del PP de Palma, Jaime Martínez, que gobierna en solitario con sólo 11 de 29 concejales.
Consecuencia de ello es que la oposición ha tirado atrás la aprobación de las retribuciones de la Corporación municipal y que aún no ha podido tomar el control de las empresas municipales que siguen gobernadas por los socialistas, ante la insuficiencia de sus apoyos, para relevar a la actual dirección en funciones.